Casa Real

Juan Carlos I abandona España ante la "repercusión pública" de la investigación de sus finanzas

El rey emérito anuncia su "meditada decisión" ante la repercusión de "ciertos acontecimientos pasados" de su vida privada.

Juan Carlos I abandona España ante la "repercusión pública" de la investigación de sus finanzas
El Gobierno no contempla "a día de hoy" retirarle el título de rey emérito y asegura que pactó la decisión "hace semanas".
El Gobierno no contempla "a día de hoy" retirarle el título de rey emérito y asegura que pactó la decisión "hace semanas".

El rey Juan Carlos ha abandonado España tras comunicar a su hijo Felipe VI su "meditada decisión", a raíz de la repercusión pública de "ciertos acontecimientos pasados" de su vida privada, ha informado este lunes el Palacio de la Zarzuela en un comunicado. Felipe VI le ha transmitido a su padre su "sentido respeto y agradecimiento" ante esta decisión. 

Según señala el comunicado, el rey emérito ha enviado a su hijo una carta en la que manifesta su "absoluta disponibilidad" para contribuir a facilitar el ejercicio de las funciones de Felipe VI ante "la repercusión pública que están generando ciertos acontecimientos pasados de mi vida privada".

La marcha del rey emérito, cuyo destino no se ha desvelado, no supondrá ningún cambio en la situación de la reina Sofía, que mantendrá su residencia en el Palacio de la Zarzuela y proseguirá con su actividad institucional ya que ha quedado al margen de la polémica acerca de los presuntos negocios opacos de su marido.

"El mejor servicio a los españoles"

Don Juan Carlos asegura haber tomado esta decisión "con profundo sentimiento, pero con gran serenidad" y ha recordado que en los casi cuarenta años que ha ejercido como rey "siempre he querido lo mejor para España y para la Corona".

También añade que su objetivo es facilitar el ejercicio de las funciones de Felipe VI "desde la tranquilidad y el sosiego que requiere tu alta responsabilidad". "Mi legado y mi propia dignidad como persona así me lo exigen", añade.

En el comunicado, don Juan Carlos recuerda que hace un año expresó su decisión de dejar de desarrollar actividades institucionales y que ahora "guiado por el convencimiento de prestar el mejor servicio" a los españoles, a sus instituciones "y a ti como rey".

En el comunicado se especifica que don Felipe le ha transmitido a su padre "su sentido respeto y agradecimiento" ante su decisión y ha remarcado "la importancia histórica" que representa el reinado de Juan Carlos I, "como legado y obra política e institucional" de servicio a España y a la democracia.

El abogado de don Juan Carlos, Javier Sánchez-Junco ha especificado que, a pesar de su salida de España, el rey emérito permanecerá "a disposición del Ministerio Fiscal para cualquier trámite o actuación que se considere oportuna", según un comunicado que ha hecho público su bufete tras conocerse el anuncio.  

Seguirá como rey emérito

El Gobierno ha expresado su respeto por el anuncio y ha destacado su reconocimiento al "sentido de la ejemplaridad y transparencia que siempre han guiado al rey Felipe VI" desde su llegada a la Jefatura del Estado. Según ha confirmado a TVE fuentes de Moncloa, el Ejecutivo pactó con la Casa del Rey "hace semanas" la salida de España del rey emérito, una negociación que llevó la vicepresidenta Carmen Calvo, por lo que "ha ocurrido lo que tenía que ocurrir".

Las mismas fuentes han precisado que, "a día de hoy", el Gobierno no contempla derogar el decreto que otorgó a Juan Carlos de Borbón el título de rey emérito tras la proclamación de Felipe VI algo que, precisan las fuentes, es "innecesario" ya que el exmonarca solo va a llevar a cabo vida privada.

En cuanto a los partidos políticos, PP y Ciudadanos han mostrado su respeto a la decisión y Vox ha denunciado un "linchamiento público" por parte de la izquierda, mientras que los partidos republicanos han criticado que Juan Carlos I "huya". Destaca la reacción del líder de Podemos y vicepresidente del Gobierno, Pablo Iglesias, quien ha calificado de "indigna" la actitud del rey emérito y ha señalado que el Ejecutivo -del que forma parte- "no puede mirar para hacia otro lado".

Negocios polémicos

La decisión se produce tras las informaciones relativas a los presuntos negocios privados del rey Juan Carlos, al que investiga la justicia por haber cobrado supuestamente comisiones por interceder en el contrato del AVE a La Meca.

El pasado mes de marzo, Felipe VI - un día después de decretarse el estado de alarma por el coronavirus- renunció a la herencia de Juan Carlos I, al que retiró además la asignación pública del Presupuesto de la Casa del Rey, que en los últimos años superó los 194.000 euros. 

Las finanzas del rey Juan Carlos llevan años bajo sospecha. En España, la Fiscalía del Tribunal Supremo ha asumido la investigación que dirigía Anticorrupción sobre el presunto cobro de comisiones para la adjudicación en 2011 del AVE a La Meca al comprobar que podría estar involucrado el rey emérito, que es aforado y cuya inviolabilidad hasta que dejó de ser rey en 2014 impide que se le pueda investigar por hechos ocurridos durante su mandato, aunque sí posteriores.

Distanciamiento progresivo

El distanciamiento entre reyes- padre e hijo- ha sido progresivo durante los últimos años con un goteo continuo de informaciones sobre el monarca en relación a sus negocios opacos y presuntas cuentas en paraísos fiscales que han desenbocado en esta decisión, que marca un antes y un después en la Monarquía española.

Las diferencias entre ambos se hicieron más evidentes cuando Felipe VI supo que su padre le había designado como beneficiario de una fundación offshore de Panamá, Lucum, a través de la que el emérito habría recibido donaciones del rey de Arabia Saudí. 

El propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en una declaración inédita hasta la fecha, mostró recientemente su preocupación por las "inquietantes y perturbadoras" noticias sobre el rey y volvió a abrir el debate sobre su inviolabilidad del rey. Desde el Gobierno, en cada intervención de todos sus miembros desde hace días, se ha destacado la "distancia" que el rey Felipe VI ha marcando con el emérito y se ha instado al monarca a "avanzar" hacia una mayor transparencia tras conocerse los presuntos negocios ilícitos de su padre.

Juan Carlos I abandona España ante la "repercusión pública" de la investigación de sus finanzas