Coronavirus

Hospitales españoles ya aplicaban en marzo corticoterapia para la COVID-19

Es un tratamiento que, según un estudio de la Universidad de Oxford, se ha demostrado eficaz. 
Hospitales españoles ya aplicaban en marzo corticoterapia para la COVID-19
Hospitales españoles, entre ellos el Doctor Peset de València, ya aplicaban a finales de marzo corticoterapia en pacientes con insuficiencia respiratoria afectados por la COVID-19, un tratamiento que según el estudio Recovery, coordinado por la Universidad de Oxford, se ha demostrado eficaz. 

Así lo ha confirmado a la Agencia EFE el doctor Ángel Atienza, médico internista y miembro del área COVID en el Hospital Doctor Peset, para quien los resultados del estudio inglés confirman "lo que nosotros esperábamos" y supondrán un cambio en el "manejo de la neumonía por COVID".

Según Atienza, la Organización Mundial de la Salud (OMS) aceptaba utilizar los corticoides en fases muy avanzadas de pacientes de las UCI con angustia respiratoria e intubados, "pero nosotros planteamos darlos en fases más tempranas de la infección, algo que se hizo en China y en Italia", señala.

Así, se aplicó en pacientes con neumonía grave que estaban empezando a sufrir insuficiencia respiratoria y con analíticas alteradas al llegar al hospital, pensando que no había que esperar a que llegara a una situación tan grave.

"Empezamos a utilizarlos y aunque al principio eran todo impresiones clínicas, vimos que los fármacos iban bien", añade Atienza, que explica que esto se difundió mucho en su momento: "Hemos tardado tiempo en confirmarlo pero a los pacientes que tenemos, ahora pocos, no hemos dejado de tratarlos de esa manera".

Con los buenos resultados observados, en un momento en el que no había evidencia científica de la utilidad de ningún fármaco, decidió compartir su experiencia por Whatsapp y tuvo más difusión de la esperada. 

Aunque fue criticado por la forma de difusión y la falta de evidencia científica del contenido, señala que pensó que estaba obligado a difundir su experiencia y sostiene que en una situación de crisis "las soluciones de las situaciones no son las habituales".

Ahora dice estar "satisfecho" con esa difusión porque si ha "animado a otros grupos a utilizar los corticoides", entonces habrá podido ayudar "a muchos pacientes". 

"Al final, adelantarnos en la utilización ha sido bueno para todo el mundo, es lo que más me satisface", afirma Atienza, que destaca que lo más importante de esto es el precio del medicamento, disponible como genérico y que permite que el tratamiento de un paciente suponga solo un coste de algo más de seis euros. 

Los médicos "trabajamos con evidencia científica basándonos en resultados de ensayos clínicos antes de aprobar una terapéutica, pero siempre he pensado que con esta pandemia, estamos ante una enfermedad que no conocemos su manejo ni tratamiento y no hay evidencia científica de nada, tienes que tratar a los pacientes como puedes", indica.

"Cómo han trabajado los médicos en una crisis como esta no tiene nada que ver con cómo trabajamos normalmente. Intentas recuperar a los pacientes y en este caso acertamos, aunque al no ser impresiones que tengas cuantificadas la gente lo critica", explica. 

Según Atienza, a final de marzo surgió la información de que la neumonía por la COVID-19 tenía una fase inicial, la infecciosa por el virus, y una segunda inflamatoria, la conocida como 'tormenta de citoquinas', parecida a un grupo de enfermedades hematológicas y reumáticas que son analítica y clínicamente muy parecidas y, por eso, se pensó en aplicar ese tratamiento de corticoides".

El estudio realizado en Oxford "confirma lo que nosotros esperábamos", según Atienza, que destaca que se trata de una investigación con un número enorme de pacientes, prospectivo y "con unos resultados que creo que son realmente aplastantes", valora.

"En algunos pacientes, la experiencia que tenemos es que la recuperación muchas veces es rápida -explica a EFE-. Son pacientes que ves que están empeorando, les pones los corticoides y, o mejoran, o ves que el empeoramento se detiene".

A su juicio, "hay una parte que no podemos olvidar, que cuando no tienes una evidencia científica tienes que basarte en la observación clínica, y es importante si ves que los pacientes están respondiendo a un tratamiento", e indica que la OMS recomendó tratamientos "sin tener tampoco evidencia científica". 

"La OMS ha sido un organismo un poco conservador en el tema del tratamiento, los médicos hemos ido por delante. Yo empecé el tema pronto pero en España hasta el 30 % de los pacientes graves, según un estudio de la Sociedad Española de Medicina Interna, ha sido tratado con corticoides".

Desde finales de marzo, cuando se comenzaron a aplicar las corticoides, la mortalidad comenzó a bajar: "No sé si por ese tratamiento o porque aprendimos a manejar la enfermedad", añade.

Hospitales españoles ya aplicaban en marzo corticoterapia para la COVID-19